lunes, 24 de junio de 2013

Arqueros

Dicen que los arqueros nacimos para recibir... Que somos los que jugamos mal...Los feos...Los que no servimos para otra cosa...
Dicen que los arqueros estamos locos y que tenemos que estar mal para estar en esa posición...
Dicen que los arqueros de hockey y de handball son los que más sufrimos...Los de handball porque se comen muchos goles aún en la victoria...Y los de hockey porque hay muchas cosas que otros arqueros de otros deportes, pueden hacer...que nosotros no...
Solo podemos salir hasta 25, no la podemos agarrar con la mano, ni levantarla peligrosamente, no podemos dejar caer una parte de nuestro equipo, no podemos darle dirección con la manopla, solo podemos pegarle con el lado plano del palo, no podemos cubrirla, no se nos puede quedar metida entre nuestra "armadura", no podemos salir jugando con los pies fuera del área...Y claramente, no podemos meter goles...Que eso es lo que hace que seamos el peor arquero en los deportes...
Peeeeerooooo la adrenalina en el momento, la sensación de sacar un bocha que es gol, la concentración, la expectativa y el silencio seguido de ovación que se escucha en un mano a mano....(será de BIEEEN PUCHERO o de Gooool del equipo contrario jajaja) y atención a esa pequeña pelota de plástico que viaja a cien km/h...Esa capacidad de poder, mirar la bocha, anticipar un movimiento, saber donde va a ir y también ordenar a tu defensa...Hace que sea uno de los puestos más interesantes, divertidos...Pero obviamente más estresantes y menos satisfactorio...
Dicen que sin nosotros no podrían...Y que un equipo se arma empezando de atrás...Y me pienso quedar con eso...jajaja

1 comentario:

  1. Yo digo que mi hermana no juega al hockey... es arquera... :)

    Igual, el peor papel no es el de la arquera. Es el de la hermana de la arquera que se come todo un partido dudando entre desear que las ataquen para ver a su hermana en acción o que ni se acerquen para quedarse tranquila.

    Recuerdo muchas tardes congelada al lado del río en VILO con esas incertidumbres...

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