viernes, 16 de agosto de 2013

Destino..

Creo y lo nombro mucho al destino...Siempre me gusto leer la parte filosófica y griega de lo que llamamos o decimos que es el destino... Se supone que es el poder sobrenatural inevitable que guía la vida humana y la de cualquier ser, a un fin no escogido de forma necesaria y fatal, en forma opuesta a la de la libertad.
En la mitología griega siempre me atrapo la mitificación, personificación y explicación del destino mediante las Moiras. Sus equivalentes en la mitología romana eran las Parcas, vestidas con túnicas blancas.
La palabra griega moira significa literalmente ‘parte’ o ‘porción’, y por extensión la porción de existencia o destino de uno. Controlaban el metafórico hilo de la vida de cada mortal desde el nacimiento hasta la muerte (y más allá).
En la tradición griega, se aparecían tres noches después del nacimiento de un bebé para determinar el curso de su vida. En origen podría haber sido diosas de los nacimientos, pero su papel fue el de verdaderas señoras del destino. Se las representaba comúnmente como a tres mujeres hieráticas, de aspecto severo y vestidas con túnicas: Cloto, portando una rueca; Láquesis, con una vara, una pluma o un globo del mundo; y Átropos, con unas tijeras o una balanza.
En otras ocasiones se les atribuye la apariencia de tres viejas hilanderas que es la que siempre me imagine y me gusto. Tres mujeres grandes hilando los destinos de las personas, y cuando este hilo se corta es la simbolización de la muerte. Se sabe que Shakespeare se inspiró en este mito para crear las tres brujas que aparecen en Macbeth, cuya intervención es determinante en el destino del protagonista. 
Creo en el destino, pero también entiendo que cada uno puede modificarlo, porque al final el destino nos da las cartas, pero nosotros somos los que jugamos...

2 comentarios:

  1. y buen, siempre se aprende algo al lado tuyoo eehh.. muy bueno seguimos esperando mas seguidos!!

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  2. estaria buenisimo que escribas... porfii!!!

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